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Marruecos es un país fascinante que combina una rica cultura, paisajes diversos y siglos de historia, y tiene algo especial para cada viajero. Desde las tranquilas calles azules de Chefchaouen hasta las vibrantes medinas de Fez y Marrakech, experimentarás una mezcla única de tradición y modernidad. Ya sea explorando el vasto desierto del Sahara, recorriendo antiguas kasbahs o disfrutando de la belleza costera de Casablanca, Marruecos te dejará recuerdos inolvidables.
En Chefchaouen, te enamorarás de sus encantadoras calles pintadas de azul y las artesanías locales. En Fez, te sumergirás en el corazón espiritual de Marruecos, rodeado por la medina más grande del mundo y una rica historia. Si buscas aventura, el desierto de Merzouga te ofrece paseos en camello por dunas doradas y noches bajo las estrellas. Ouarzazate, conocida como el Hollywood de África, te cautivará con sus kasbahs y estudios de cine. Marrakech, con sus bulliciosos zocos, hermosos palacios y jardines exuberantes, hará que tu visita sea inolvidable.
El tour empezará el día 19 de Abril desde el aeropuerto de Tánger sobre las 3 de la tarde y acabrá el 26 de Abril sobre las 11:45 de la mañana
Se puede coger el avión donde venga mejor a cada participante
NUESTRO TOUR EMPIEZA SOBRE LAS 3 DE LA TARDE EL DÍA 19/04/25 DESDE EL AEROPUERTO DE TÁNGER. Pódeis salir desde donde queráis el importante es llegar en Tánger el día 19 de abril para salir a las 3 de la tarde directamente hacia Chefchaouen.
Llegaremos en Chechaouen tendremos cena libre y tiempo para descansar.
Despertamos temprano, desayunamos en el hotel y salimos para Fez. Llegaremos en Fez y tendremos visita guiada. Después tiempo libre y cena todos juntos.
Despertaremos muy temprano para salir con camellos y disfrutar del amanecer. Después empezaremos nuestro viaje hacia Ouarzazate pasando por paisajes muy bonitos entre las Gargantas de los Dades. Haremos paradas durante el camino para comer y disfrutar de los paisajes. Llegaremos por la tarde, cenaremos juntos y depués descanso.
Despertaremos temprano para salir hacia Marrakech. Haremos paradas durante el camino y una para comer y visitaremos Ait Ben Haddou uno de los sitios más famos donde se han rodeado peliculas muy famosas como Juegos de Tronos y disfrutaremos de los paisajes ofrecidos por Monte Atlas. Una vez llegados Marrakech podremos descansar y cena libre en la ciudad.
Despertamos temprano, desayunamos y salimos hacia Casablanca. Llegaremos, visitaremos Casablanca y comeremos juntos. Por la tarde saldremos hacia Asilah donde podéis tener cena libre. Alojaremos allí para nuestra última noche en Marruecos.
Despertamos muy temprano, desayunamos y salimos hacia Tánger. Una vez llegados allí pararemos en aeropuerto para hacer el check-in y despedirnos de Marruecos.
Chefchaouen, conocida como la perla azul de Marruecos, es una ciudad que cautiva a cada viajero con su atmósfera única. Situada en las montañas del Rif, sus calles adoquinadas serpentean entre casas y fachadas pintadas en distintos tonos de azul, creando un paisaje de ensueño que parece sacado de una postal. Más que un simple destino, Chefchaouen es una experiencia sensorial: el aroma del pan recién horneado y las especias impregnan el aire, mientras que las tiendas de artesanías exhiben tejidos, cerámica y productos locales que reflejan la herencia bereber y andalusí de la ciudad.
Pasear por su medina es perderse en un laberinto de callejuelas estrechas, donde cada rincón ofrece una nueva perspectiva digna de fotografiar. La Plaza Uta el-Hammam, con su vibrante ambiente y cafés tradicionales, es el corazón de la ciudad, perfecta para hacer una pausa y disfrutar del ritmo pausado de la vida local. Desde aquí, la Kasbah, una fortaleza rodeada de jardines, ofrece vistas panorámicas y una ventana a la historia de Chefchaouen.
Pero más allá de su estética incomparable, lo que hace especial a Chefchaouen es su serenidad. Aquí el tiempo parece detenerse, permitiendo a los viajeros desconectar y sumergirse en la esencia del lugar. Chefchaouen es un destino que combina historia, cultura y belleza natural, convirtiéndose en una parada imprescindible para quienes buscan una experiencia auténtica y enriquecedora en Marruecos.
Fez, la capital cultural de Marruecos, es una ciudad donde la historia cobra vida en cada rincón. Su medina, Fez el-Bali, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es un laberinto fascinante de callejuelas estrechas, mercados vibrantes y arquitectura medieval que se mantiene intacta con el paso del tiempo.
Explorar Fez es sumergirse en siglos de tradición. La Universidad Al Quaraouiyine, la más antigua del mundo en funcionamiento, refleja el legado intelectual de la ciudad, mientras que las icónicas curtidurías ofrecen un espectáculo de colores y técnicas artesanales que han perdurado por generaciones. Cada zoco, madraza y riad es un testimonio del esplendor cultural de esta ciudad milenaria.
Pero más allá de su historia, Fez es una ciudad vibrante y acogedora. Sus riads tradicionales, con patios llenos de mosaicos y fuentes, ofrecen un refugio de tranquilidad, mientras que su gastronomía deleita con sabores como el cordero con ciruelas y la menta fresca. Fez no es solo un destino, es un viaje en el tiempo, un lugar donde cada callejón cuenta una historia y donde la autenticidad marroquí se vive en su máxima expresión.
Merzouga, la puerta de entrada al impresionante desierto del Sahara, es un destino que transporta a un mundo de dunas doradas, cielos infinitos y un silencio sobrecogedor. Situada en el sureste de Marruecos, esta pequeña aldea es el punto de partida ideal para adentrarse en el corazón del desierto y vivir una experiencia inolvidable.
Las dunas de Erg Chebbi, algunas de más de 150 metros de altura, ofrecen un espectáculo natural que cambia de tonalidades con la luz del día. Al amanecer y al atardecer, el paisaje se tiñe de tonos dorados y anaranjados, creando un escenario mágico que deja sin aliento. Recorrerlas en camello, como lo han hecho los nómadas durante siglos, es una de las experiencias más auténticas que se pueden vivir en Marruecos.
Pero Merzouga no es solo arena y dunas. Aquí, la cultura bereber sigue viva en la hospitalidad de sus habitantes, en su música tradicional y en sus platos típicos como el cuscús y el tajín cocinado a fuego lento. Pasar una noche en un campamento bajo un cielo estrellado es la mejor manera de conectar con la esencia del desierto, donde la inmensidad y la paz crean una sensación única de desconexión y libertad.
Merzouga es más que un destino, es una experiencia que despierta los sentidos y deja recuerdos imborrables. Un viaje al desierto que promete aventura, tranquilidad y una conexión profunda con la naturaleza y la cultura marroquí.
Ouarzazate
Ouarzazate, conocida como la “puerta del desierto”, es una ciudad que combina historia, cultura y paisajes impresionantes. Situada entre el Alto Atlas y el Sahara, ha sido un punto clave para caravanas, viajeros y cineastas que han encontrado en sus paisajes un escenario perfecto.
Su mayor tesoro es la Kasbah de Ait Ben Haddou, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este antiguo ksar, con sus torres de adobe y calles laberínticas, parece detenido en el tiempo y ha sido el telón de fondo de innumerables películas y series. Pasear por sus callejones es viajar siglos atrás y descubrir la arquitectura tradicional bereber en su máxima expresión.
Ouarzazate es también el epicentro de la industria cinematográfica marroquí. Sus estudios de cine, los más grandes de África, han acogido producciones icónicas como Gladiator y Juego de Tronos.
Más allá del cine, la ciudad ofrece paisajes espectaculares, desde valles fértiles hasta áridas montañas rojizas. Los alrededores invitan a descubrir oasis escondidos y gargantas impresionantes como las de Dades y Todra. Con su mezcla de tradición, aventura y cine, Ouarzazate es una parada esencial en cualquier ruta por Marruecos.
Marrakech, la joya vibrante de Marruecos, es una ciudad que desborda historia, cultura y energía. Conocida como la “ciudad roja” debido al color de sus murallas y edificios, Marrakech ofrece una experiencia única que combina la tradición árabe, bereber y andaluza. Su medina, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es un laberinto de callejuelas estrechas, mercados bulliciosos y monumentos históricos que hacen que cada rincón cuente una historia.
Uno de los principales atractivos de Marrakech es la Plaza Jemaa el-Fna, un espacio animado y lleno de vida donde se mezclan músicos, vendedores de especias, encantadores de serpientes y puestos de comida tradicional. Desde aquí, se puede acceder a la impresionante Koutoubia, la mezquita más grande de la ciudad, cuyo minarete es un icono de Marrakech.
Los riads de la ciudad, con sus patios llenos de flores, mosaicos y fuentes, ofrecen un refugio de paz y serenidad en medio del bullicio urbano. La ciudad también es famosa por sus jardines, como el Majorelle, un oasis de tranquilidad y color, y el Jardín de la Menara, con vistas a las montañas del Atlas.
Además de su arquitectura y paisajes, Marrakech es un lugar de sensaciones. Los aromas de las especias, el té de menta y la comida tradicional, como el cuscús y el tajín, invaden el aire, mientras que las tiendas de artesanías, alfombras y joyas ofrecen una muestra de la rica tradición artesanal marroquí.
Marrakech es, sin duda, un destino que enamora con su mezcla de historia, cultura, arte y tradiciones. Un lugar donde el pasado y el presente se encuentran en perfecta armonía, y que promete dejar huella en todo aquel que lo visite.
Casablanca, la ciudad cosmopolita de Marruecos, es un destino único donde la modernidad y la tradición se encuentran. Conocida como la capital económica del país, su ambiente dinámico está marcado por una arquitectura contemporánea que se mezcla con la rica historia local. Un símbolo icónico de la ciudad es la Mezquita Hassan II, una de las más grandes del mundo, que se alza majestuosa sobre el océano Atlántico. Su minarete de 210 metros es visible desde casi cualquier punto de la ciudad, y su impresionante diseño arquitectónico atrae a miles de visitantes.
La costa de Casablanca es igualmente impresionante. La zona de la Corniche ofrece vistas panorámicas al mar, con una gran variedad de restaurantes y cafés donde disfrutar de la brisa marina. Además, el Parque de la Liga Árabe y otros espacios verdes ofrecen un respiro de tranquilidad en medio del bullicio urbano.
Aunque la medina de Casablanca es más pequeña y menos frenética que las de otras ciudades marroquíes, tiene su propio encanto con mercados de productos frescos y artesanías locales. Barrios como Habous, conocidos por su arquitectura tradicional, muestran la vida cotidiana marroquí y su cultura.
Casablanca también es famosa por su vida nocturna, con bares, discotecas y restaurantes de moda que reflejan la modernidad y el estilo cosmopolita de la ciudad. Desde su costa hasta sus elegantes centros comerciales, Casablanca es una ciudad que combina lo mejor de la tradición marroquí con la vibrante vida urbana. Un destino perfecto para quienes buscan una experiencia completa y moderna en Marruecos.
19/04/25: Salida 14:55 —– Llegada 15:20
19/04/25: Salida 11:05 —– Llegada 11:35
19/04/25: Salida 12:30 —– Llegada 13:30
19/04/25: Salida 13:00 —— Llegada 12:50
Política de cancelación
Política de cancelación para el viaje: Hasta 30 días la devolución del 80% del importe total. Hasta 3 semanas el 60% del importe total. Hasta 15 días 50% del importe total. Menos de 15 días antes del viaje, no podemos reembolsar ningún dinero a menos que sea debido a las restricciones del gobierno o emergencia de salud. Si llegas tarde al punto de encuentro, no te devolveremos el dinero y lo perderás. El programa está diseñado con mucha experiencia y guías pero puede haber cambios debido al tráfico, el tiempo u otra alternativa mejor (te informaremos por correo y grupo de WhatsApp). El importe de la reserva y las actividades no son reembolsables.